Rivas Vacaciamadrid: horizonte cercano de una gran comunidad energética local

Rivas Vacaciamadrid: horizonte cercano de una gran comunidad energética local

Aída Castillejo, alcaldesa de Rivas Vaciamadrid y vicepresidenta de la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI), desgrana las condiciones fundamentales de las Smart City y el impacto de las iniciativas de su ayuntamiento.

Hemos querido conversar con la alcaldesa de Rivas Vaciamadrid y vicepresidenta segunda de la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI), Aída Castillejo. Al frente de una ciudad comprometida y en pleno proceso de transformación digital y sostenible, Castillejo nos comparte varias iniciativas lideradas por el ayuntamiento y su impacto socioeconómico. En cuanto a la RECI, para Castillejo “El referente de la RECI es clave para los municipios porque podemos incluso tutelar experiencias que sabemos están funcionando muy bien en varios Ayuntamientos”.

TSCJ.- ¿Qué aspectos considera que son fundamentes en una Smart City?

Aída Castillejo.- Son muchos, pero desde luego, la democratización en el uso de las nuevas tecnologías aplicadas a la ciudadanía. Eso redunda en cercanía hacia la gente y mayor accesibilidad de la administración a la gente. Y al final, eso nos permite afianzar, facilitar y mejorar el servicio público hacia la población, optimizando y rentabilizando los recursos municipales, que son siempre escasos y finitos.

TSCJ.- ¿Cuáles son los proyectos o acciones más significativas que se han llevado a cabo en Rivas Vaciamadrid en su transformación digital y sostenible?

Aída Castillejo.- Evidentemente todo lo que ha supuesto la eliminación del papel en las relaciones entre ciudadanía y administración. Estamos hablando de una administración electrónica, de tramitación y gestión de prácticamente toda la documentación mediante expedientes y registros digitales. La interconexión e integración de casi todas nuestras aplicaciones, la posibilidad de la atención telemática y, por supuesto, la apuesta clara por una movilidad sostenible en el marco de una evolución de ciudad que decidió parar su crecimiento urbanístico para pensar hacia dónde vamos como municipio. En este sentido, la participación ciudadana utilizando nuevas tecnologías también ha sido fundamental. Por poner algunos ejemplos concretos, tenemos plataformas de información y de gestión directa con la ciudadanía (app de ciudad), la integración de la domótica y la inteligencia artificial en la gestión eficiente de nuestros edificios y recursos, la implementación de sistemas de ahorro energético y la gestión tecnológica de los mismos, la inversión en fotovoltaica para tender hacia el autoconsumo como productores y reducir la dependencia de las grandes suministradoras, la protección de nuestros datos con un despliegue e inversión importante en ciberseguridad, la inteligencia artificial aplicada también a la atención ciudadana (chatbot de texto y voz, atenciones y tramitaciones telemáticas, etc.) lo que ha ampliado también la forma de relacionarnos con nuestros vecinos y vecinas. O la transformación digital también en materia de seguridad ciudadana con nuevas y mejores formas de comunicación y de vigilancia preventiva. Son solo algunos ejemplos.

TSCJ.- ¿Qué impacto han tenido estos proyectos o acciones?

Aída Castillejo.- Pues un impacto mayúsculo, del que realmente seremos conscientes según vayan avanzando los años. Por poner algunos datos, sólo en lo que llevamos gestionando directamente la compra de energía en el ayuntamiento, con la gestión también de nuestros centros productores de fotovoltaica, hemos conseguido un ahorro de casi 3 millones de euros en la factura eléctrica, dinero que se han podido reutilizar para otro tipo de acciones municipales. Hemos reducido la brecha digital con la ciudadanía facilitando espacios y entornos conectados, redes wifi gratuitas, una red de 23 puntos de recarga de vehículos eléctricos que se sigue ampliando, la apuesta por la movilidad sostenible que se ratifica con una red de carriles bici segregados de 21 kilómetros o el servicio Bicinrivas con una media de 15.000 usos mensuales para una población como la nuestra. Pero también se ha notado en cómo la población se relaciona ahora con la administración local. Estos proyectos han supuesto un acercamiento y una nueva forma de intercomunicación de nuestros servicios con la ciudadanía. Cercanía y optimización de recursos municipales, pero ampliando la atención.

TSCJ.- En línea con los ODS, ¿cómo le gustaría ver Rivas Vaciamadrid en 2030?

Aída Castillejo.- Rivas está centrada ya con sus políticas en esos diez objetivos estratégicos. Estamos ordenando el territorio y ha sido nuestra propia población quien avaló que parásemos las licencias urbanísticas y que reflexionáramos sobre el modelo de ciudad al que vamos, revitalizando nuestra propia ciudad y poniendo a nuestra gente, a nuestra ciudadanía actual en el centro. Estamos trabajando para reducir los impactos climáticos, estamos haciendo políticas de recursos sostenibles, nuestro plan de economía circular en marcha desde hace años, la apuesta decidida por la fotovoltaica en edificios públicos y la facilitación a la ciudadanía de incluirse en estas dinámicas energéticas con el horizonte cercano de una gran comunidad energética local. La movilidad sostenible con vehículos no contaminantes, habilitando espacios para bicicletas, potenciando el servicio Bicinrivas, los carriles bicis, ampliando la red de recarga de vehículos eléctricos, etc. Pero además intentando limitar las desigualdades, ofreciendo ayudas a familias con menos recursos, bonificaciones para el pago del IBI, planes de igualdad de género, ordenanzas en esta línea, o incluso en las ofertas públicas a la hora de implementar acciones correctivas que reduzcan esa brecha de género o brecha económica en otros casos. Estamos desarrollando el plan municipal de vivienda para jóvenes en régimen de alquiler; estamos haciendo en estos años una revolución digital espectacular en nuestro ayuntamiento y nuestra ciudad, lideramos y fomentamos esa innovación también en redes como la RECI, la Red Española de Ciudades Inteligentes… y todo buscando mejorar nuestra gobernanza y la optimización de nuestros recursos mientras facilitamos instrumentos de intervención con la ciudadanía. Eso es lo que marcan los ODS de la Agenda 2030 y en eso ya estamos trabajando para que podamos llegar a ese año con los deberes hechos o, al menos, muy avanzados.

TSCJ.- Como vicepresidenta segunda de la RECI, ¿cómo cree que apoya ésta a los territorios y al personal técnico de los municipios?

Aída Castillejo.- Es muy importante el intercambio de información y de experiencias, y eso es uno de los puntos fuertes de la Red. Es necesario avanzar y seguir trabajando en esta línea. También la Red está trabajando muy bien de la mano de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y ahora más aún con las ayudas europeas que están llegando. El referente de la RECI es clave para los municipios porque podemos incluso tutelar experiencias que sabemos están funcionando muy bien en varios Ayuntamientos. Pero además el personal técnico tiene la posibilidad de contactar, contrastar y conocer o formarse en esas acciones que se están poniendo en común continuamente a través de la RECI. Sin duda somos un eje tractor de todo este movimiento y conocimiento. Y así debe seguir siendo.

Utilizamos cookies propias y de terceros para posibilitar y mejorar su experiencia de navegación por nuestra web. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.