Resulta vital implementar planes de mentoring para incorporar nuevos perfiles, asegurando que la valiosa experiencia de aquellos que se jubilan no se pierda
España se encuentra en una encrucijada. Con un número récord de 2.731.117 empleados públicos registrados en febrero de 2023, el país se enfrenta a la necesidad imperativa de una transformación digital en profundidad. Este cambio no solo implica la adquisición de habilidades técnicas, sino que también demanda una nueva mentalidad y una redefinición de las estrategias en las Administraciones Públicas (AAPP). La mejora de las competencias digitales, la falta de motivación, la necesidad de fortalecer el compromiso público y atraer o retener talento son desafíos estratégicos a los que nos enfrentamos.
Un aspecto que provoca gran inquietud es el envejecimiento de la plantilla y la previsible salida masiva de profesionales al llegar a la edad de jubilación en los próximos años. Este fenómeno anticipa una pérdida significativa de experiencia y conocimiento, elementos cruciales que las administraciones públicas deben prevenir y gestionar de manera efectiva para la calidad y eficiencia de los servicios. Surge entonces la siguiente pregunta: ¿Cómo se enfrenta esta crisis de talento en las AAPP?
La transformación digital, aunque desafiante, ofrece una oportunidad única para abordar este problema. Las herramientas tecnológicas avanzadas como el Big Data y la Inteligencia Artificial (IA) pueden jugar un papel crucial en esta nueva etapa. Por otro lado, una reforma de la legislación que propicie pruebas de acceso más ágiles y relacionadas al máximo con las funciones digitales que el futuro funcionario deba desempeñar, podría ser un camino fructífero para mejorar el proceso de incorporación de nuevo personal.
Resulta vital implementar planes de mentoring para incorporar nuevos perfiles, asegurando que la valiosa experiencia de aquellos que se jubilan no se pierda, y guiando a los recién llegados en su proceso de adaptación a la administración pública. La jubilación masiva previsible en menos de una década abre una ventana de oportunidad para atraer un gran volumen de talento joven, bien preparado y totalmente adaptado a la era digital.
Es indispensable que fomentemos y valoremos la vocación de servicio público. El sector público debe esforzarse por transmitir la relevancia e impacto de su trabajo y atraer a aquellos con un verdadero interés en servir a la ciudadanía. Debemos garantizar políticas públicas atractivas y dinámicas que den respuesta a los desafíos actuales: cohesión social, empoderamiento ciudadano, competitividad y sostenibilidad.
La adopción de herramientas actuales de gestión de recursos humanos se presenta como una estrategia valiosa para mejorar la gestión del talento y, por ende, el funcionamiento de estas organizaciones. Además, la implementación de nuevas tecnologías podría ayudar a las AAPP a adaptarse mejor a los cambios futuros, tales como la creciente digitalización y la transformación del mercado laboral.
Puede existir cierto temor respecto a la Inteligencia Artificial, en especial ante la idea de que estas tecnologías pueden deshumanizarnos o reemplazarnos en áreas inherentes al factor humano, como los recursos humanos. Sin embargo, desde mi perspectiva, estas tecnologías no están diseñadas para desplazar o sustituir a los gestores de capital humano. Al contrario, pueden facilitar su trabajo, automatizando tareas rutinarias y permitiéndoles enfocarse en tareas más estratégicas que aporten valor a la organización.
La IA y el Big Data tienen un gran potencial para optimizar la gestión de recursos humanos, mejorar la eficiencia de los procesos, identificar y retener talentos, y potenciar la calidad del desempeño y la satisfacción laboral de los servidores públicos.
En definitiva, aunque nos enfrentamos a un desafío enorme, también estamos ante una oportunidad única para modernizar y mejorar las administraciones públicas. La transformación digital, respaldada por una nueva legislación y una gestión avanzada de los recursos humanos, puede ser la solución para superar la crisis de talento y preparar al sector público para los retos del futuro.
Este es el momento de abrazar el cambio, de utilizarlo como palanca para mejorar el servicio que prestamos a la ciudadanía. Estamos en la era de la digitalización y debemos aprovecharla para fortalecer nuestras AAPP, dotándolas de las herramientas y capacidades necesarias para afrontar los retos del siglo XXI. Este es el camino que nos permitirá mantener y mejorar la calidad de los servicios que prestamos a nuestros ciudadanos, haciendo de nuestras administraciones públicas lugares más eficientes, atractivos y adaptados a las demandas de una sociedad cada vez más digital.
Autor
Pedro Pérez
T-Systems Iberia, Client Account Executive en T-Systems Iberia
Pedro Pérez cuenta con más de 30 años de experiencia en el sector de las TIC. Licenciando en ingeniería informática por la UPC, comenzó su carrera profesional en el sector de la automoción, digitalizando y modernizando departamentos como compras y logística en grandes multinacionales, y construyendo e implantando sistemas corporativos en grandes organizaciones, utilizando palancas como la gestión documental y la gestión de procesos para eficientar los procesos transversales.
En los últimos once años, ha estado centrado en la colaboración con el sector público para impulsar la modernización de los sistemas informáticos de las Administraciones Públicas, aplicando innovación disruptiva tanto tecnológica como organizativa, promoviendo la identificación de retos de negocios para transformar tanto los procesos más transversales, como por ejemplo de la Función Pública o los departamentales como en Educación, Cultura, Interior y otros ámbitos.